Rubén Moreno/ Único Diario
Melampo, el nombre del perro que de acuerdo a la historia religiosa asistió a San Roque durante su sufrimiento por la peste en su natal Francia, cuentan que diariamente el animal acudía donde el enfermo y le llevaba un pan, robado de la mesa de su dueño, quien en consecuencia se percató del estado del santo ayudándolo en su recuperación.
Por este acto en la iglesia de San Roque, en el corazón de la capital, se celebró una vez más una misa especial cuyo objeto es bendecir a las mascotas, recordando que los animales son parte de la creación y pueden ser usados con fines misteriosos.
Francisco Javier Gómez, sacerdote de la iglesia, relató que este acto de fe tiene poco más de cinco años realizándose, incrementándose su popularidad no sólo entre los fieles de este templo, sino atrayendo a personas de otros municipios como Jaltenango o la Concordia.
“El año pasado tuvimos al rededor de cien perros, este año esperamos que sea mayor el número, siempre se acercan más creyentes que quieren una bendición especial sus perros y mascotas.”
La misa para bendición de las mascotas, sucede cada 15 de agosto, cuando decenas de perritos, y otras animales desfilan por el atrio de la iglesia, impacientes a la espera del acto religioso que recuerda la ayuda brindada a San Roque en tiempos de sufrimiento. Este año fueron poco más de 200 los animales que acudieron a la misa.
Javier Gómez, aceptó que esta misa no es de la aceptación de todos, situación que divide opiniones entre quienes piensan que no es correcto que los animales y sus dueños ingresen a la iglesia, sin embargo dice que sólo se trata de una misa breve y ordinaria que no busca incomodar a nadie, sino sólo otorgar una bendición a estos fieles compañeros.